Aprender a bañar a un gato puede parecer obvio, pero como muchas personas descubren, es más difícil de lo que parece. Bañar adecuadamente a un gato lleva tiempo de preparación y lo más probable es que sea un buen compañero.
En primer lugar, los gatos rara vez necesitan ser bañados. Su gato no debería tener que bañarse más de dos veces al mes como máximo, a menos que tenga una afección de la piel o haya adquirido algunas toxinas. Bañar demasiado a tu gato puede provocar problemas en la piel.
Antes de bañar a tu gato:
1. Posiblemente encuentra a alguien que lo ayude a bañar a este gato. Muchas veces una persona puede sostener al gato mientras que la otra puede bañarse o correr por cosas que puede haber olvidado, como una toalla extra.
2. Recorta las uñas de tu gato de antemano. A los gatos no les gusta mojarse y muchas veces intentarán morder o rascarse. Tomarse el tiempo para recortar las uñas de su gato de antemano puede ayudar a prevenir algunos rasguños graves.
3. Reúne todos los suministros que necesitas para bañar a tu gato. Toallas, champú, un cepillo o un peine, y tal vez algunos paños viejos para usar.
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Ahora que estás listo para bañar a tu gato sigue estos pasos:
1. Es mejor sostener a tu gato firmemente justo detrás del cuello. Agarre la piel extra allí y manténgala firme. Un agarre adecuado no permitirá que tu gato se gire y te muerda o te rasque.
2. Llene lentamente el fregadero o el tubo con unas pocas pulgadas de agua tibia. Es posible que desee hacer esto de antemano si su gato tiene miedo del agua corriente.
3. Usa una taza para remojar el cuerpo de tu gato, evitando la cabeza. Remoje lentamente a su gato con agua tibia.
4. Luego aplique una pequeña cantidad de champú, no demasiado o será difícil de enjuagar. Masajearlo lentamente, haciendo espuma.
5. Enjuagar a tu gato es la parte más importante. Asegúrese de quitar todo el jabón restante. Cualquier jabón que quede en su gato, y es probable que lo ingiera y podría enfermarse.
6. Seca bien a tu gato. Esto es vital, especialmente si vives en un clima más fresco.
Aprender a bañar a un gato es fácil, pero en realidad hacerlo puede ser bastante difícil, como cualquiera que haya intentado bañar a un gato ha descubierto. Buena suerte, y evita ser mordido. Las mordeduras de gato son muy graves, y si te muerden, lava bien la herida con agua y jabón.
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