El fibrosarcoma vacunal es una neoplasia altamente infiltrante tanto en extensión como en profundidad.
No suele ser metastático. Lo característico de este tumor es que, posteriormente a la resección quirúrgica el tumor suele recidivar con mucha mayor agresividad. Por tal motivo es fundamental una primera resección quirúrgica muy amplia y profunda ( incluyendo el plano quirúrgico siguiente). Su particular conducta biológica justifica y exige la biopsia prequirúrgica frente a una tumoración cutánea.
El origen del fibrosarcoma puede ser de desconocido (como la mayoría de los tumores), o puede ser inducido por el virus del Sarcoma Felino. Actualmente se ha observado cierta relación entre las vacunaciones y la aparición de fibrosarcoma en el lugar de aplicación, por lo que se habla de un fibrosarcoma vacunal o vacuna-inducido.
El fibrosarcoma vacunal se caracteriza por:
- observarse un aumento de incidencia de este tipo de tumor a partir de la vacunación antirrábica obligatoria en los felinos;
- los gatos de zonas libres de rabia, y en consecuencia que no son vacunados, tienen una muy baja incidencia ;
- el lugar de aparición del tumor coincide con la zona de vacunación detrás de la escápula y muslos;
- el fibrosarcoma post-vacunal es más agresivo que el observado en otras áreas corporales;
- las vacunas a virus muerto, como la rabia y la vacuna de la leucemia felina han sido igualmente implicadas.
Si bien la incidencia es muy baja variando según los autores y las zonas entre el 1 en 1000 a 1 en 10.000, es decir el 0.01%, no es despreciable la dificultad con que se enfrenta el profesional actuante.
Guia para prevenir el sarcoma vacuna-inducido o vacunal según Association Of Feline Practitioners (feb 1998)
1) Evitar las vacunaciones innecesarias.
2) Estandarizar áreas de vacunación Los miembros posteriores suelen recomendarse pues de aparecer un sarcoma se ve favorecida la curación mediante la amputación de la pata.
MPD= vacuna antirrábica.
MPI = vacuna de la Leucemia Felina
PCD= Distemper Felino
3) Prestar especial atención a bultos o hinchazones en áreas de vacunación. Los abscesos de fijación estéril, suelen aparecer de 3 a 4 semanas siguientes a la vacunación. Suelen resolverse solos. Si el bulto o hinchazón perdura más de tres meses o aparece más allá de los seis meses de la vacunación, es aconsejable su resección quirúrgica y posterior biopsia.
